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Foto: Diario de Navarra
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Dolorosa despedida la vivida ayer en el Real Oviedo. Y es que el pasado martes José Ángel Ziganda comunicaba al Real Oviedo que no iba a continuar en el banquillo azul.
Una decisión que ha causado un gran dolor en gran parte de la afición que consideraban al navarro como la persona idónea para seguir en el cargo de entrenador.
Cuco Ziganda se va tras dos temporadas y media en el banquillo oviedista. Llegó al Oviedo en febrero de 2020 con el equipo coqueteando con el descenso y al que consiguió salvar. A la temporada siguiente el club estuvo toda la temporada en tierra de nadie sin pasar apuros.
Y en esta última temporada estuvo la totalidad de ella en los puestos altos de la tabla y solo un gol privó a los azules de jugar el play-off en lo que fue la mejor temporada desde el ascenso a segunda en 2015.
El ya ex-tecnico azul se despidió en la mañana de ayer en la sala de prensa del Carlos Tartiere en una emocionante y emotiva rueda de prensa.
Ziganda comenzó su locución diciendo que "mi intención era comunicar mi decisión personal, bien pensada y consensuada con mi familia. Hemos decidido no seguir aquí. Tras unos días de reflexión y espera hemos decidido no continuar".
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Foto: La Nueva España
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Ziganda dice que se siente "muy orgulloso de haber estado aquí" y añade que "ha sido un auténtico lujo poder representar al Real Oviedo y poder ser yo".
Sobre su salida comenta que "es una decisión personal" y añade que "no he tenido una propuesta del club asi que no puedo decir que he rechazado algo porque no ha sido así".
De su paso por el club carbayon dice que "han sido dos años buenísimos y dejarlo aquí también es un privilegio. No gustas a todo el mundo, pero es fútbol y hay que entenderlo".
Preguntado acerca de que se lleva de aquí comenta que "me quedo con la rampa el dia del Ibiza" que define como "espectacular". También se queda con los derbis de los que dice "no los conocía y ha sido un auténtico privilegio vivirlo y jugarlo. Y ganarlos ya, ni te cuento".
Por último el ya ex-tecnico azul tuvo unas palabras para los aficionados a los que les dió las gracias "por todo el cariño mostrado" y añade que "es el motor del club, pero hay que cuidarlo y mantenerle vivo para que siga funcionando y tire hacia adelante".
Tambien quiso lanzar un mensaje a los aficionados: "me voy yo y vendrá otro que también ilusionará, les gustará o les cabreará, así es el fútbol" sentenció.