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| Foto: Mario Rojas |
Sergio Díaz que fue presentado ayer, asume el reto del equipo para la presente campaña y no considera que eso sea una presión añadida, sino que se lo toma como «una responsabilidad». «Me gusta la responsabilidad que tiene el club, me gusta la exigencia que tiene la afición, creo que es bueno y hay que saber convivir con ella», aseguró el futbolista.
El defensa agradeció a Carmelo del Pozo y al club azul el esfuerzo que hicieron para que él pueda jugar en el Oviedo y dijo que las negociaciones fueron sencillas, ya que desde que recibió la llamada del conjunto ovetense no tuvo «ninguna duda en venir al Oviedo tanto por la historia que tienen, por el club, por la afición, por el estadio». «Es muy buen equipo», aseguró.
Algo que quiso dejar claro el defensa es que no quiere pensar en otra cosa que no sea la próxima temporada en el Oviedo. «Del pasado lo único que tenemos que hacer es aprender, porque de eso no se vive y ahora mismo lo único que pienso es en el Real Oviedo y lo único que tengo en la cabeza es esta temporada y el Real Oviedo». En este sentido, dejó claro que «ahora mismo no pienso en el Mallorca, pienso en el Oviedo. Si lo hiciera en el Mallorca no hubiera venido al Oviedo», hizo hincapié.
El nuevo jugador azul se disputará la plaza de lateral izquierdo con Sergio Rodríguez, algo que no le preocupa ya que considera bueno para el equipo. «Hay otro compañero en esta posición, pero lo más importante es que la competencia entre los dos sea sana, que al final va a beneficiar a todo el equipo», insistió. Además, tiene claro que «lo más importante no es competir entre nosotros, sino competir los domingos contra los rivales y conseguir el objetivo que tenemos marcado desde el principio».
Respecto al objetivo, asume que «no me lo tomo como presión, es responsabilidad y no me pesa. El club tiene que quedar primero y ascender, se está haciendo un proyecto para ello y lo vamos a conseguir».
Ramón Julio García / El Comercio
El defensa agradeció a Carmelo del Pozo y al club azul el esfuerzo que hicieron para que él pueda jugar en el Oviedo y dijo que las negociaciones fueron sencillas, ya que desde que recibió la llamada del conjunto ovetense no tuvo «ninguna duda en venir al Oviedo tanto por la historia que tienen, por el club, por la afición, por el estadio». «Es muy buen equipo», aseguró.
Algo que quiso dejar claro el defensa es que no quiere pensar en otra cosa que no sea la próxima temporada en el Oviedo. «Del pasado lo único que tenemos que hacer es aprender, porque de eso no se vive y ahora mismo lo único que pienso es en el Real Oviedo y lo único que tengo en la cabeza es esta temporada y el Real Oviedo». En este sentido, dejó claro que «ahora mismo no pienso en el Mallorca, pienso en el Oviedo. Si lo hiciera en el Mallorca no hubiera venido al Oviedo», hizo hincapié.
El nuevo jugador azul se disputará la plaza de lateral izquierdo con Sergio Rodríguez, algo que no le preocupa ya que considera bueno para el equipo. «Hay otro compañero en esta posición, pero lo más importante es que la competencia entre los dos sea sana, que al final va a beneficiar a todo el equipo», insistió. Además, tiene claro que «lo más importante no es competir entre nosotros, sino competir los domingos contra los rivales y conseguir el objetivo que tenemos marcado desde el principio».
Respecto al objetivo, asume que «no me lo tomo como presión, es responsabilidad y no me pesa. El club tiene que quedar primero y ascender, se está haciendo un proyecto para ello y lo vamos a conseguir».
Ramón Julio García / El Comercio
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