 |
| Foto: Pablo Nosti |
Iván da Conceiçao Gómez nació hace 14 años nació en El Berrón. Es una de las actuales promesas del fútbol base del Real Oviedo, lidera la clasificación del Trofeo Quini de primera infantil con 41 goles, y, además, el máximo goleador actual de todas sus categorías.
«Mi objetivo personal cada temporada es aumentar mis números, pero preferiría marcar menos goles y quedar mejor clasificado con el equipo», afirma Iván. Si se llevara este año el galardón con el que la Federación de Peñas Sportinguistas y EL COMERCIO distingue a los mejores artilleros del Principado, no sería algo desconocido para él puesto que, hace dos temporadas, ya se hizo con él cuando militaba en primera alevín. Repetir sería una gran ilusión, pero no se olvida de lo que realmente le importa, el colectivo: «Fue una bonita experiencia y me gustaría volver a ganarlo, pero mis goles son para todo el equipo, no son para mí».
El infantil A del Real Oviedo marcha tercer clasificado, pero lejos del líder y sin opciones reales de ganar la Liga, como él mismo reconoce: «estamos lejos del liderato, en los partidos importantes nos faltó suerte, fallamos oportunidades y lo pagamos caro».
En las últimas semanas, Conceiçao ha empezado a foguearse en una categoría superior como la segunda cadete. Y no le ha ido nada mal, porque, en su segundo partido, anotó 4 goles. Lo curioso es que ahora es un delantero goleador, pero, hace unos años, jugaba de libre en El Berrón, el equipo en el que se crió y en el que jugó hasta su segundo año de alevín. Poco a poco fue adelantando su posición y, cuando lo fichó el Real Oviedo, lo colocaron de forma definitiva en la punta del ataque, donde demuestra cada fin de semana sus dos máximas cualidades: la velocidad y la potencia.
Todavía le queda mucho camino por delante, pero tiene las ideas muy claras. «Solo pienso en el Real Oviedo, mi objetivo es llegar al primer equipo, y debutar en el Tartiere es para mí una prioridad», afirma de forma contundente durante una conversación en la que deja entrever una gran madurez para un chico de tan solo 14 años. De la categoría destaca el potencial de muchos jugadores, especialmente del Sporting, Avilés y Roces, y de su equipo tiene especial debilidad por dos jugadores: «Jaime Arias y Guillermo Vázquez, dos amigos y compañeros que me ayudaron y me ayudan mucho».
Tampoco olvida sus raíces y a un equipo de El Berrón en el que varios de sus jugadores fueron fichados por clubes potentes del fútbol asturiano. «Éramos un grupo de amigos y un gran equipo, tengo mucho que agradecerle a mi entrenador en aquella época, Tino Álvarez», reconoce Iván.
Por último, como referentes, tiene a dos símbolos actuales del oviedismo, Diego Cervero y Michu. Quizás dentro de unos años Iván Conceiçao sea referente para algunos de los chavales que estén en El Requexón.
«Mi objetivo personal cada temporada es aumentar mis números, pero preferiría marcar menos goles y quedar mejor clasificado con el equipo», afirma Iván. Si se llevara este año el galardón con el que la Federación de Peñas Sportinguistas y EL COMERCIO distingue a los mejores artilleros del Principado, no sería algo desconocido para él puesto que, hace dos temporadas, ya se hizo con él cuando militaba en primera alevín. Repetir sería una gran ilusión, pero no se olvida de lo que realmente le importa, el colectivo: «Fue una bonita experiencia y me gustaría volver a ganarlo, pero mis goles son para todo el equipo, no son para mí».
El infantil A del Real Oviedo marcha tercer clasificado, pero lejos del líder y sin opciones reales de ganar la Liga, como él mismo reconoce: «estamos lejos del liderato, en los partidos importantes nos faltó suerte, fallamos oportunidades y lo pagamos caro».
En las últimas semanas, Conceiçao ha empezado a foguearse en una categoría superior como la segunda cadete. Y no le ha ido nada mal, porque, en su segundo partido, anotó 4 goles. Lo curioso es que ahora es un delantero goleador, pero, hace unos años, jugaba de libre en El Berrón, el equipo en el que se crió y en el que jugó hasta su segundo año de alevín. Poco a poco fue adelantando su posición y, cuando lo fichó el Real Oviedo, lo colocaron de forma definitiva en la punta del ataque, donde demuestra cada fin de semana sus dos máximas cualidades: la velocidad y la potencia.
Todavía le queda mucho camino por delante, pero tiene las ideas muy claras. «Solo pienso en el Real Oviedo, mi objetivo es llegar al primer equipo, y debutar en el Tartiere es para mí una prioridad», afirma de forma contundente durante una conversación en la que deja entrever una gran madurez para un chico de tan solo 14 años. De la categoría destaca el potencial de muchos jugadores, especialmente del Sporting, Avilés y Roces, y de su equipo tiene especial debilidad por dos jugadores: «Jaime Arias y Guillermo Vázquez, dos amigos y compañeros que me ayudaron y me ayudan mucho».
Tampoco olvida sus raíces y a un equipo de El Berrón en el que varios de sus jugadores fueron fichados por clubes potentes del fútbol asturiano. «Éramos un grupo de amigos y un gran equipo, tengo mucho que agradecerle a mi entrenador en aquella época, Tino Álvarez», reconoce Iván.
Por último, como referentes, tiene a dos símbolos actuales del oviedismo, Diego Cervero y Michu. Quizás dentro de unos años Iván Conceiçao sea referente para algunos de los chavales que estén en El Requexón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario