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| Foto: OVD Sport |
Las bases, inamovibles, quedaron sentadas desde que Toni Fidalgo se
hizo cargo del club. «No gastaremos ni un euro por encima de los
ingresos», pronunció el presidente en su primera intervención en el
cargo. La declaración de intenciones se convirtió automáticamente en
dogma: por la viabilidad del Oviedo, nadie puede pasar por encima de
este principio. Tampoco Quique Pina. Toni Fidalgo le comunicó las
condiciones de un posible acuerdo al empresario y el murciano no aceptó.
La planificación deportiva no estará en las manos de Pina.
Tras
el primer contacto matinal, Fidalgo y Pina quedaron en volver a dialogar
por la tarde, siempre por vía telefónica. A las 9 de la noche, el
presidente del Oviedo le trasladó la oferta definitiva al murciano. El
club podría ofrecerle un desembolso para configurar la plantilla que
estuviera entre los 600.000 y los 800.000 euros. Jorge Sánchez, asesor
externo de Fidalgo en asuntos económicos, trabaja desde el primer
momento en valorar la situación económica del club. Por la premura de
las negociaciones no fue posible cifrar la cantidad exacta, pero sí el
margen en el que podía moverse el presupuesto. A Pina se le ofreció una
alternativa: todo desembolso que superara la cantidad marcada debía
correr a cargo del empresario con una última condición: en caso de
ascenso, la cantidad sería reintegrada a Pina.
Es decir, si el
murciano quería formar una plantilla de, por ejemplo, 1,2 millones de
euros, debía pagar de su bolsillo unos 400.000 euros. Si al final de
temporada, el Oviedo lograba el objetivo del ascenso, los 400.000 euros
serían abonados íntegramente al murciano. Pina escuchó la propuesta de
Fidalgo y rechazó la posibilidad. Veía demasiados riesgos en la
operación. La oferta cogió a Pina por sorpresa, que había visto la
opción planteada por el Ayuntamiento como una ocasión para ayudar al
club azul.
La actuación del nuevo consejo de administración cuenta
en todo momento con el respaldo del Consistorio que desde que llegó a
un acuerdo con Fidalgo y su grupo de trabajo para que liderara el
consejo de transición aceptó que asumiera la responsabilidad en las
decisiones. «No podemos hacer lo que llevamos cinco años criticando»,
explicaron fuentes del consejo después de que se rompiera el acuerdo.
Ahora,
el proyecto deportivo echará a andar al margen de Pina. En la tarde de
ayer ya se confirmó que la vuelta a los entrenamientos se producirá el
próximo lunes. Fermín Álvarez será el encargado de dirigir las sesiones
hasta que el consejo encuentre la persona adecuada para liderar el nuevo
proyecto azul. Tras romperse las negociaciones con Pina, en las
próximas horas comenzará la búsqueda de técnico y la configuración de la
plantilla, que estará presidida por la contención en el gasto. Ahora
mismo el Oviedo cuenta con 14 jugadores.
Una de las consecuencias
directas es que desaparecerá la figura de director deportivo. El cargo
desempeñado por José Manuel Martínez en las últimas temporadas quedará
vacante. Uno de los primeros frentes de batalla de Fidalgo para aceptar
el cargo fue el de evitar que Pedro Cordero fuera elegido consejero. La
idea era intentar que el club se ahorrara un sueldo extra, como el de
director deportivo o secretario técnico, que el nuevo órgano rector
considera innecesario en Segunda B.
El Oviedo sigue siendo un
destino muy apetecible para muchos gestores deportivos. Antes de que se
rompiera el acuerdo con Pina, el club ya recibió el ofrecimiento de más
gestores deportivos para hacerse cargo de la entidad. Si se apuesta por
un modelo como el que pretendía Pina, estará en todo caso limitado por
los condicionantes económicos que rodean al Oviedo. El consejo es
tajante al respecto.
Visita del Real Madrid
El desembarco de Pina en el Oviedo parecía tan seguro en las últimas
jornadas que el murciano ya había liderado alguna operación para el club
azul. La llegada de Lucas Alcaraz como técnico era una de ellas, pero
la que más había llamado la atención del aficionado fue el amistoso que
el murciano había cerrado con el Madrid en el Tartiere el 24 de julio.
La ruptura de las negociaciones no implica necesariamente que se cancele el amistoso. El Madrid ya ha dado el visto bueno a la disputa del partido y Fidalgo trabaja en las últimas horas para que el encuentro tenga unas condiciones más ventajosas para el Oviedo. Según el acuerdo alcanzado con Pina, el Oviedo debía hacerse cargo del desplazamiento del Madrid y de su estancia en la ciudad. A cambio recibiría el 25 por ciento de lo ingresado en la taquilla, con lo que sólo un lleno haría que la jugada fuera rentable. Pero las ausencias en la expedición blanca (llegaría sin los internacionales españoles, alemanes, portugueses, franceses y Marcelo) y el hecho de disputarse en pleno julio podría restar afluencia.
Ahora, Fidalgo se esfuerza por cerrar el amistoso con algunas modificaciones respecto al acuerdo inicial de Pina.
La ruptura de las negociaciones no implica necesariamente que se cancele el amistoso. El Madrid ya ha dado el visto bueno a la disputa del partido y Fidalgo trabaja en las últimas horas para que el encuentro tenga unas condiciones más ventajosas para el Oviedo. Según el acuerdo alcanzado con Pina, el Oviedo debía hacerse cargo del desplazamiento del Madrid y de su estancia en la ciudad. A cambio recibiría el 25 por ciento de lo ingresado en la taquilla, con lo que sólo un lleno haría que la jugada fuera rentable. Pero las ausencias en la expedición blanca (llegaría sin los internacionales españoles, alemanes, portugueses, franceses y Marcelo) y el hecho de disputarse en pleno julio podría restar afluencia.
Ahora, Fidalgo se esfuerza por cerrar el amistoso con algunas modificaciones respecto al acuerdo inicial de Pina.
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