Foto: Piña |
El consejo de administración se dio un baño de masas en su encuentro
con los accionistas. Lo que antes era un territorio abonado a la
confrontación, las disputas y las reclamaciones se ha convertido ahora
en un lugar para el encuentro entre dirigentes y afición. El consejo
sacó adelante todas sus propuestas en la junta de accionistas con la
unanimidad de los presentes (salvo una excepción) gracias al apoyo de
Carlos Slim, representado ayer en la figura de Juan Fábrega.
Toni
Fidalgo abrió el fuego a las 20.14 horas. En la sala principal del
auditorio Príncipe Felipe estaba representado el 52,01 del capital
social: 712 personas con derecho a voto suponían el 45,38 del capital,
mientras que fueron 777 las personas representadas en el acto añadiendo
la delegación de acciones.
El presidente aprovechó su intervención
para agradecer a todos los agentes que habían hecho posible la
salvación del Oviedo. Una actuación que ha cambiado el panorama. «Ahora
la gente me pide el ascenso por la calle», reconoció Fidalgo, que
aprovechó para defender el trabajo de Sarriugarte. «Hace unas semanas la
gente me exigía su destitución olvidando que este técnico fue el único
oviedista que en verano aceptó este reto en unas condiciones muy
complicadas», explicó.
Fidalgo también hizo referencia en su
intervención al mercado de invierno. «Es como comprar un décimo de
lotería», lo definió; «no es sencillo acertar, pero lo que todo el mundo
debe tener claro es que no se cometerán barbaridades. Económicamente,
el club está aún en la uvi». Por último, el presidente repasó las
posibilidades que aún le quedan al club para cuadrar el presente
presupuesto. «Entrar en play off, lograr un patrocinador o añadir 1.000
nuevos abonados en la segunda vuelta». Los presentes coronaron la
intervención de Fidalgo con una cerrada ovación.
Jorge Sánchez,
asesor del consejo, tomó la palabra tras el presidente para la
explicación del patrimonio neto de la entidad. Los 4.341.454,71 euros
suponen, tras la ampliación de capital, un panorama muy diferente del
que se tenía hace unos meses. La composición del consejo fue el
siguiente punto en el orden del día. Antes de la votación, a mano alzada
con el fin de agilizar la sesión, Roberto Sánchez, representante de la
APARO, felicitó al consejo por sus logros e instó a que continuaran
actuando conforme a dos principios: «sentido común y sentimiento
oviedista». La votación dio la confianza al consejo por unanimidad.
Las
cuentas anuales también encontraron el refrendo de la totalidad de los
asistentes. También hubo unanimidad a la hora de rechazar la gestión del
órgano de administración, referida a la actuación del anterior consejo
liderado por González y Martín Vaca. La aprobación del presupuesto
presentó algunas pegas: 5 votos en contra y 8 abstenciones, una anécdota
en un acto de apoyo total al actual consejo «seguimos siendo
igual de pobres, pero seguimos siendo el Oviedo, un club diferente»,
pronunció como colofón Pedro Zuazua arrancando la ovación final.
El consejo de administración que dirigirá el Oviedo en adelante es el mismo que salió nombrado de la junta del pasado 12 de julio. Toni Fidalgo como presidente; Sabino López, Pedro Zuazua y Juan Ramón González, como consejeros, y Jorge Sánchez y Hugo López, como asesores, con el apoyo de Antonio Mijares como secretario, repiten en el cargo. Las circunstancias, sin embargo, han cambiado mucho desde entonces. La llegada de Carlos Slim tras invertir dos millones de euros le dan al club un aspecto que no era soñado en julio.
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