Foto: Irma Collin |
El Oviedo regresó a los entrenamientos tras un necesario descanso para aclarar la mente. La derrota de Elviña pasa ahora a un segundo plano y la plantilla se centra ahora en derrotar al Castilla el domingo para seguir con el sueño del ascenso vivo. «Los días posteriores a la derrota fueron complicados para todos porque teníamos mucha ilusión por recortar algún punto al Tenerife. Nos marchamos muy tristes del terreno de juego, pero ya estamos con la cabeza arriba y deseosos de que llegue el domingo», explicó Martins.
El vestuario ya no esconde que lo del domingo se trata de una final. «No tenemos margen de error y el domingo sólo hay la opción de ganar. Lo tenemos muy claro y el equipo está mentalizado para sumar los tres puntos. Competimos realmente bien ante los equipos de arriba en la clasificación», comentó el senegalés.
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