Foto: Irma Collin |
Con la figura más estilizada que nunca, Álvaro Cuello (Oviedo, 1989)
ya ha entrado en la recta final para su regreso. La lesión de peroné
unida a la inactividad en verano le hizo entrar en la pretemporada con
cuatro kilos menos que ha ido recuperando con el trabajo diario. Una
molesta tendinitis supuso una nueva zancadilla y su ausencia del equipo
en las primeras jornadas.
La excelente imagen mostrada la
temporada pasada y los fallos defensivos en las últimas derrotas han
hecho que el aficionado azul le eche de menos. «¿Qué pasa con Álvaro?»,
se escucha por El Requexón mientras el canterano mejora sus sensaciones a
marchas forzadas. Ahora será Sarriugarte el que ponga fecha concreta a
su regreso.
¿Mucha lata el verano con la escayola?
Demasiada.
Espero no tener que volver a ponerla, pero la parte positiva de sufrir
una lesión así en verano es que te pierdes menos partidos. Ahora ya
estoy a tope. Llevo un par de semanas bien.
A nivel físico, ¿ya está al cien por ciento?
La
lesión ya la he olvidado, ahora me queda coger el punto de forma que no
pude coger en la pretemporada por la tendinitis y empezar a tener
minutos en la competición.
¿Cómo está viendo el inicio de campaña desde la grada?
Con
algo de impotencia. Ya me había hecho a la idea durante el verano, pero
cuesta. El primer partido es el más duro, luego te vas acostumbrando.
En el Tartiere el equipo está siendo sólido, otra cosa es fuera de casa?
La
temporada pasada se pasaron todo el año buscando las razones del mal
rendimiento a domicilio. ¿Teme seguir con la misma cantilena?
Es
mejor dejar de pensar en las dinámicas. Empiezas a pensar que no ganas
fuera de casa, te descentras de tu trabajo y acabas rindiendo peor. Hay
que plantear el partido sin pensar dónde se desarrolla. Cuando lo
logremos llegarán los resultados.
¿Qué les dice Sarriugarte de este problema?
Es
que no lo consideramos un problema en sí. No tiene nada que ver con lo
del año pasado, hay que saber diferenciar. Llevamos dos partidos fuera
sin ganar, la racha no debería ir a más. No lo tratamos como un
«problemón» de nueve meses sin ganar fuera de Asturias.
¿Su reto personal es entrar en el once?
Es
complicado por el nivel defensivo que hay y porque las cosas, salvo un
par de tropiezos, marchan bien. Si se abre un hueco hay que meterse.
Si le dicen en verano que iba a tener tan difícil entrar en el equipo le hubiera costado creerlo.
Fue
un verano atípico. No sabíamos nada del futuro del equipo. Empezamos 14
jugadores, sólo un fichaje? fue todo un poco raro. Pero en un mes se
solucionó y se hecho un buen equipo.
¿Fue complicada su renovación?
Había
mucha incertidumbre. Negociaba con una persona -José Manuel- que me
decía que no iba a estar en el proyecto. No sabía cómo actuar. Me olvidé
de quién podría estar o no en el club y renové. Si podía seguir en el
Oviedo cumplía mi deseo.
¿Se llegó a ver fuera del Oviedo?
No. Una cosa es valorar otras opciones y otra verte de verdad lejos del Tartiere. Siempre me vi de azul.
¿Para Sarriugarte es Álvaro el lateral izquierdo, el lateral derecho o el central?
Debería
preguntarle a él. Entrenando a veces juego en la izquierda, otras en la
derecha y en alguna ocasión por dentro. No da pistas. Le gustan los
futbolistas polivalentes.
Tras las últimas derrotas fuera la gente reclama que regrese al once
Hay que tener tranquilidad, conmigo el equipo también perdió partidos fuera de casa el año pasado.
Pero notará que es uno de los favoritos de la grada
Favorito
no sé, el cariño sí lo percibo. Es algo que me llena de orgullo. Que la
gente te diga que tiene ganas de verte cuando te recuperas de una
lesión ayuda y te hace volver con más ganas. Pero no porque se haya
perdido tengo que regresar antes.
Sin Pelayo en el club, muchos le ven como el modelo a seguir de la cantera
No
es una presión, todo lo contrario. También ha regresado Cervero. Es
bueno que todos los chavales de El Requexón se fijen en gente como él,
que vean que sí es posible llegar. Trabajando y con esfuerzo, viendo la
situación económica actual, la cantera tiene que ser básica en el primer
equipo.
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