Foto: Irma Collin |
Óscar Martínez se administró el jueves en la Copa del Rey la mejor
medicina que hay para un delantero: marcar un gol. El gallego pone fin
así a una mala racha que comenzó con una rotura fibrilar hace ya cuatro
meses, en los que ha encadenado varias lesiones que le han mantenido al
margen del resto de sus compañeros.
«Tuve la suerte de marcar nada más empezar; así que muy contento por el gol y sobre todo por pasar la eliminatoria», confesaba el jugador tras el entrenamiento de la mañana de ayer en el Requexón. Para el gallego las victorias en los dos primeros partidos oficiales de la temporada no hacen más que confirmar «que se está trabajando bien. Muchas veces, aunque estés trabajando bien, si los resultados no llegan te hace dudar un poco del trabajo».
El delantero reconoció a su vez que, con Félix Sarriugarte, «el sistema ha cambiado, son conceptos distintos a los de la temporada pasada, ni mejores ni peores», pero que le dan la posibilidad de coincidir con otro delantero en el campo, como ocurrió el jueves ante el Fuenlabrada con Jairo Cárcaba. «En Copa se crearon ocasiones y también en Avilés. De momento el modelo de Sarriugarte está dando resultados», añadía el jugador.
El buen ambiente que reinaba ayer en el Requexón gracias al esperanzador arranque de campaña también afectaba a Javi Casares, el otro goleador del partido ante el Fuenlabrada. «Es algo muy positivo empezar con buen pie. Da confianza y unidad al equipo», aseguraba el jerezano. El ex jugador del Alavés también quiso agradecer a la afición el apoyo que está mostrando al equipo: «Lo de la afición de este equipo no tiene nombre. 6.100 espectadores en la primera ronda de la Copa del Rey es algo que llama la atención. Hay equipos de Primera que no tienen tanta afición como nosotros. Así todo va a ser más fácil».
Y es que ayer en el Requexón todo eran sonrisas y buenas palabras. Es lo que tiene empezar ganando.
Antonio Lorca / La nueva España
«Tuve la suerte de marcar nada más empezar; así que muy contento por el gol y sobre todo por pasar la eliminatoria», confesaba el jugador tras el entrenamiento de la mañana de ayer en el Requexón. Para el gallego las victorias en los dos primeros partidos oficiales de la temporada no hacen más que confirmar «que se está trabajando bien. Muchas veces, aunque estés trabajando bien, si los resultados no llegan te hace dudar un poco del trabajo».
El delantero reconoció a su vez que, con Félix Sarriugarte, «el sistema ha cambiado, son conceptos distintos a los de la temporada pasada, ni mejores ni peores», pero que le dan la posibilidad de coincidir con otro delantero en el campo, como ocurrió el jueves ante el Fuenlabrada con Jairo Cárcaba. «En Copa se crearon ocasiones y también en Avilés. De momento el modelo de Sarriugarte está dando resultados», añadía el jugador.
El buen ambiente que reinaba ayer en el Requexón gracias al esperanzador arranque de campaña también afectaba a Javi Casares, el otro goleador del partido ante el Fuenlabrada. «Es algo muy positivo empezar con buen pie. Da confianza y unidad al equipo», aseguraba el jerezano. El ex jugador del Alavés también quiso agradecer a la afición el apoyo que está mostrando al equipo: «Lo de la afición de este equipo no tiene nombre. 6.100 espectadores en la primera ronda de la Copa del Rey es algo que llama la atención. Hay equipos de Primera que no tienen tanta afición como nosotros. Así todo va a ser más fácil».
Y es que ayer en el Requexón todo eran sonrisas y buenas palabras. Es lo que tiene empezar ganando.
Antonio Lorca / La nueva España
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