Foto: Irma Collín |
La Asociación de Peñas Azules del Real Oviedo (Aparo)
espera hechos por parte del consejo de administración y duda de las
buenas intenciones mostradas en el comunicado del pasado jueves. Su
presidente, Hugo López, afirmó ayer que «lo que tiene que hacer Control
Sport, si de verdad quiere facilitar la transición, es delegar sus
acciones en el Ayuntamiento».
Los anuncios realizados por el consejo no la distraerán
de sus objetivos, advirtió el representante de las peñas: «nosotros
seguiremos recogiendo las delegaciones de acciones para poder llegar a
la junta con el capital necesario para plantar cara a los actuales
dirigentes».
Lo que está claro para los aficionados es que el club
deber sufrir un cambio en el accionariado porque «es fundamental acabar
con la etapa de Alberto González al frente del club ya que nos ha puesto
al borde de la desaparición». Las dudas sobre las intenciones del
consejo se deben, según el presidente de la Aparo, a que «han mentido
sistemáticamente en estos años y nadie cree en lo que dicen».
El futuro del Oviedo pasa, según Hugo López por «poder
acometer una reducción de capital y que desaparezcan las dudas de los
que están al frente del club». Sin embargo, una vez pasado ese primer
trámite será necesario que los aficionados respondan. «Luego habrá que
demostrar que la afición quiere decidir el futuro del club y para eso
deberemos participar en la ampliación de capital en la medida de
nuestras posibilidades», insistió Hugo López.
Además de esa aportación de los aficionados en la
ampliación de capital, desde la Aparo se entiende que será
imprescindible otro tipo de accionistas: «es imprescindible que haya un
accionista de referencia porque los aficionados no podríamos sostener el
club». En este sentido, el presidente de la asociación confía en que
aparezcan empresarios interesados en entrar en el club. «Se ha hablado
mucho de interés de gente por invertir y ahora ha llegado el momento de
salgan a la palestra», afirmó.
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